NUESTRA SEÑORA DEL
PILAR
Doña
Urbana Martínez de Martínez, el 5 de febrero de 1872, donó un
pedazo de terreno para la construcción de una capilla, que ya
hacia mucho tiempo se pensaba levantar. Reemplazaría al viejo
oratorio que se había construido, aproximadamente, en 1795.

 |
 |

El imafronte, orientado al este-noreste, es de superficie lisa,
con forma rectangular vertical, de elegantes proporciones. Se
destacan: la puerta de ingreso de dos hojas de madera, de
terminación recta con enmarcado de pilastras y cornisa superior;
en el eje de simetría, la ventana coral, culminando con una rica
cornisa en todo su ancho. Sobre ésta, la espadaña, que es de
líneas curvas, contrastando con la base, tiene dos orificios que
terminan en arco de medio punto para alojar las campanas, que
cuelgan de sendas vigas de madera. Todo culmina en una artística
cruz de hierro forjado.



La nave rectangular mide 18,60 m de largo por 6,05 m de
ancho. Tiene techo abovedado.
"El
límite parietal desprende del arranque de la bóveda a través de
un entablamento, donde arquitrabe, friso y cornisa siguen líneas
clásicas".
La sacristía, de unos 16,00 m2,
está ubicada sobre la derecha
con salida al
exterior por una puerta de una hoja de algarrobo. Una escalera
de material comunica con el pequeño espacio que balconea a la
nave, desde donde se podía participar de la misa.
Tiene el piso
original de ladrillones.
En 1976, el Arq. Román Madoery, a cargo de un reciclaje de la
obra, introdujo algunas reformas post-conciliares pero
respetando las características de la antigua fábrica.



La imaginería, los objetos de uso litúrgico y el mobiliario de
esta capilla son de muy buena factura y estado de conservación.



Tres imágenes son anteriores al año 1795: la de Nuestra Señora
del Pilar,
Nuestra Señora de los Dolores y un Cristo de madera
encarnado en cruz y peana, pintado y sobredorado.
“Las tres
imágenes han sido completamente restauradas por especialistas,
destacándose entre ellas, la de la imagen patrona por su serena
belleza, armonía de formas, delicada policromía y finísima
ornamentación original: corona de plata orlada de piedras
preciosas y pendientes de perlas naturales",
comenta el Arq. Madoery.
Cabe consignar que la imagen de Nuestra Señora de los Dolores
actual, fue donada por Don Mario Echenique, bisnieto de uno de
los constructores de la Capilla, que lo hizo en homenaje a su
madre. La original, a raíz de una mala maniobra realizada por
el Padre Azúa S.J., por su disminuida visión, tomó fuego y el
deterioro fue tal, que imposibilitó su restauración.
En el inventario de 1975, se consigna la existencia de una
imagen de madera de Santa Teresa de Jesús.
También existe un
Niño Dios y la hermosa imagen del Cristo yacente, colocada en su
urna de cristal, que probablemente ha pertenecido a la Capilla
de Soconcho, hoy desaparecida, ya que en el inventario
practicado en 1795, se anota: “Un señor de Agonía de vara y
media con cajón y vidriera de cristal de dos varas y medias".



“En conjunto representan todas las técnicas y modalidades de la
imaginería colonial, al punto que sean de talla completa, tallas
parciales con aplicaciones de telas encoladas, o talas parciales
con vestimentas reales aplicadas".


LAS TIERRAS:
Año 1589
(recibe merced) |
El capitán Adrián Cornejo o Adrián Moyano Cornejo (1565-
1621), recibe una merced de tierras otorgadas por el
gobernador Juan Ramírez de Velazco. |
8 julio
1642
(merced) |
El capitán Luis de Argüello (1614-1694) nieto de Moyano
Cornejo, obtuvo del gobernador Miguel de Sesse, tierras que
iban de la boca del Río Segundo hasta
"Los
Acequiones"
y terminaban en las sierras
"El
Hinojo"
y
"Los
pájaros blancos".
|
23 junio 1650
(merced) |
El mismo capitán, recibe del gobernador Francisco Gil
Negrete una merced de tierras, ratificaba las otorgadas a su
abuelo cuyos títulos se habían perdido y las ampliaba con
tierras linderas ubicadas en una cañada llamada “Pampa
Grande”.
Todas estas tierras, con una dimensión de una legua y media
de norte a sur y tres leguas de este a oeste, Argüello fundó
una estancia que puso bajo la advocación de Nuestra Señora
de Copacabana. |
25 marzo 1694
(traspaso) |
Fallece el capitán Luis de Argüello y le sucede en la
tenencia y administración de la estancia, su hijo el
sargento mayor Sebastián Argüello (1636-1714). |




|
5 septiembre 1712
(Los Molinos) |
El nombre original de Copacabana fue desapareciendo para dar
lugar al de Los Molinos proveniente de los dos molinos que
antiguamente había construído
en el lugar, el capitán Luis de Argüello. En el testamento
de su hijo Sebastián de Argüello, la redacción comenzaba con:
“Los Molinos, 5 de septiembre de
1712”. |
Año 1714
(dote) |
Las
tierras fueron dadas en dote a su hija doña Lucía Argüello
cuando se casó con Tomás Martinez de Betancur. |
Año 1760
(Nuevo oratorio) |
El maestro de campo don Juan José Martínez
de Betancur (1716-1787) en unión con su esposa doña Josefa
Gonzalez Carriazo (1728-1785), mandaron edificar un oratorio
privado en el casco de la estancia Los Molinos, para el
ejercicio de sus devociones religiosas, en compañía de sus
deudos y criados. Cinco años después ya se administraban los
sacramentos y al poco tiempo pasaba de privado a público,
atendiendo a todo el vecindario. |
10 octubre 1767
(división de tierras) |
Don José, don Sebastián y don Juan José Martinez Betancur,
formalizaron la subdivisión del establecimiento de campo que
heredaron de su padre, en tres partes iguales. |
20 noviembre 1778
(solicita autorización) |
Ante la irregularidad manifiesta de que el oratorio carecía
de autorización para funcionar como público, su propietario
solicitó a S.S. Pío VI, la autorización pertinente, la que
fue otorgada por rescripto. |
25 febrero 1781
(autorización) |
Todos los vecinos pudieron cumplir con el precepto de la
misa en el oratorio, los días festivos, merced a la
autorización otorgada por el Obispo de Córdoba, Fray José
Antonio de San Alberto, al conocer el documento papal. Ya
esta presente la devoción por la zaragozana Virgen del
Pilar. |
Año 1795
(título sacristán) |
El Obispo Don Ángel Mariano Moscoso, de visita en el
oratorio expide título de sacristán a don Juan José Martínez,
hijo. |
28 febrero 1795
(otorga permiso) |
El
obispo Moscoso otorga permiso para la construcción de un
nuevo oratorio, de mayor capacidad, a solicitud del
presbítero don Juan Manuel Martínez,
su hermano don José Olegario, don Juan José y doña Rita Martínez,
esposa de Juan Patricio Echenique. Este nuevo templo se
construiría en un lugar separado de las habitaciones.
|
28 marzo 1828
(título de sacristán) |
Don Segundo Nereo Martínez, nieto del fundador del oratorio,
recibe de la autoridad eclesiástica, el título de
Sacristán
del oratorio público de Los Molinos. |


Datos complementarios:
Las Fiestas Patronales se celebran el 12 de octubre.
La Capilla, los domingos por la mañana, habitualmente se
encuentra abierta.

Decía Hugo Wast :
"¿Alguno
de ustedes, mis amigos, ha veraneado en una casita de adobes, de
paredes blanqueadas un mes antes, pavimentada de ásperos
ladrillos y techada de cañas y paja nueva?.
Si no lo han hecho no pueden imaginarse mi dicha. Tenía yo diez
y nueve años y una pieza para mi solo. Era una pieza larga y
estrecha, con una recia puerta de algarrobo, pintada de verde, y
una ventanita de dos hojas, sin vidrios, que daba hacia un patio
y miraba al naciente."
La casa a que se refiere Gustavo Adolfo Martinez Zubiría, era
de su abuela y estaba contigua a la sacristía de la Capilla.
"Pienso
que gustará a algunos de mis lectores saber como escribí y como
publiqué Alegre mi primera novela, hace de esto
bastantes lustros, como que debí comenzar mi tarea poco después
de salir del colegio, donde me gradué de bachiller…
Hacia fines de 1902, en Los Molinos, aldea escondida en la
provincia de Córdoba, donde yo pasaba los veraneos en compañía
de mi santa abuela, puse manos a la obra.
Era un sitio ideal para esa tarea, porque allí no sucedía nada,
vivía aislado del mundo y no tenía más diversiones que una linda
escopeta inglesa, que me dio mi padre y un paquete de hojas en
blanco para borronear.
Sin urdir ningún plan, sin saber que iba a ocurrirles a mis
personajes, un día empecé mi primer novela, con muchos bríos".
En otro libro, Las Espigas de Ruth, narra
historias de aquella inolvidable aldea cordobesa, donde la
Capilla juega un importante papel.
Coordenadas:
Latitud: 31º 51’ 17,46" S
Longitud:
64º 22’ 41,30"
O

Fuentes de consulta:
-
GALLARDO, Rodolfo (Ver
Biografía); MOYANO ALIAGA, Alejandro; MALIK de TCHARA,
David,
Las Capillas de Córdoba – Estudios de arte Argentino –
Academia Nacional de Bellas Artes, 1989.
-
GALLARDO, Rodolfo (Ver
Biografía),
Las Capillas antiguas de Córdoba
;
Revista Summa/Historia
Nros. 193 y 194.
nov/dic
1983.
-
HUGO WAST – Obras completas
-
MADOERY, Román,
Centenario de la Capilla de Nuestra Señora del Pilar de Los
Molino
-
1976.
-
Mucho agradecemos al Sr. Mario Echenique, la información
brindada
|