Síntesis

La Iglesia de Nuestra Señora del Carmen de Inriville, Departamento Marcos Juárez, Córdoba, (Argentina) se ubica en un terreno donado Miguel Taditti y fue bendecida, con la presencia de Monseñor Laffite en julio de 1930 luego de unos seis años de búsqueda de recursos económicos y obras. Distintos viajeros describen la zona: Sourryère de Souillac, Francisco de Amigorena, John Miers, Robert Elwes, Samuel Haigh, Hermann Burmeister, etc. Las tierras son las propias donde se ubicaba, en tiempos del Camino Real, la Posta de Lobatón en cercanías del Río III y que, con el correr de los años, devinieron en distintas estancias que se fueron unificando en manos de la familia Araya de Avenada. Con la llegada del Ferrocarril en 1910 y siendo, por entonces, Inri Jesús Araya de Avenada el Jefe Político de Marcos Juárez, la Empresa inglesa que tiende la red ferroviaria elige el nombre de Inriville para la población que se gesta vecina a la nueva estación. El Sacerdote Juan Carole supervisará la obra cuyos planos fueron realizados por el Ingeniero Carlos Caselli.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Home
Objetivos
Busqueda
Busqueda por Nombre
Busqueda por Localidad
Mapas
Las Capillas y el Arte
Fiestas
Biografias
Patrimonio
Glosario
Contacto

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

La Página Web "Capillas y Templos" está registrada en la DNDA (Ver detalle)

 

 

NUESTRA SEÑORA DEL CARMEN

 

El 16 de junio de 1948, la Revista "Leoplán" - Magazine Popular Argentino n°338 publica "El último perro", la novela de Guillermo House.

De la misma extraemos los primeros párrafos donde se describe de un modo poético lo que era la Esquina y Posta del Lobatón: "No tenía edad. Aplastada por el silencio, estaba allí. Se la adivinaba casi, arrellanada como bataraza clueca entre el pajonal, diluida en el tono imperante, adaptada por mimetismo al color, a la forma y al medio. Su único árbol, un sauce añoso, apenas si alcanzaba a peinar los techos de junco. Plantada sobre el repecho de una suave lomada, era difícil advertirla desde la dirección del sur y hasta de la opuesta. A su vez, los moradores valíanse de un mangrullo para transponer cómodamente con la vista ese imperceptible obstáculo. Era, sin embargo, tan elemental la estructura del divisadero, que podía confundirse a la distancia con el ramaje de un árbol seco.

Quien viniera desde el rumbo de la Cruz del Sur solo habría logrado ver, al acercarse, un achatado tunal y, en medio, la sospecha del sauce, perdidos en la espesura de los cardales gracias al disimulo de la precaución.

Abandonada en la inmensa pampa, como un huevo gaucho de ñandú, la Esquina y Posta del Lobatón no tenía edad. Como los indios viejos".

 

Ilustración de Arteche - Revista "Leoplán" - Magazine Popular Argentino n°338

"El último perro" de Guillermo House

 

Para quienes estén interesados en los acontecimientos previos a lo consignado en el presente material y que involucran a la ruta de transito que, a través del sudeste cordobés, conectaba Buenos Aires tanto con el Alto Perú como con Chile, les aconsejamos se remitan al contenido reservado a Cruz Alta.

 

Josef Reseguín nació en 1742 en Tarrasa (España) y con tal solo 15 años ingresó en la Real Escuela Militar de Matemáticas establecida en Barcelona. En 1780 ubicado en Montevideo y con 38 años recibe, de manos del Virrey Juan José de Vértiz, el ascenso a Teniente Coronel de los Dragones de Buenos Aires. Un año después inicia una marcha de 20 días rumbo a La Plata en el Alto Perú para asumir el cargo de Gobernador Intendente del Puno y proceder a sojuzgar el levantamiento de Tupac Amaru y Tupac Katari. Copiando la ruta que previamente había transitado Concolorcorvo, deja constancia, en varios escritos, las vivencias de dicho largo viaje. Uno de esos documentos datado con fecha 24 de julio de 1786 lleva por título "Examen de postas de las jurisdicciones de Córdova, San Tiago del Estero y San Miguel del Tucumán". De dicho material una vez superada la Posta de Cabeza de Tigre y habiendo alcanzado la Posta de Lobatón, rescatamos que Reseguín atribuye a Bruno Gutiérrez el cargo de Maestro de dicha Posta y describe a la misma como  "... sobrante de caballos, tiene guarto para los Correos y Pasageros con puerta y llabe. Le falta la Ordenanza de Pastos y Sebada, tiene título y hecha la contratación con la administración de Córdova. El maestro de posta hizo presente que no encuentra postillones que quieran servir en la casa por lo solitario y expuesto del paraje en que está situado, razón porque no tiene más de uno. Así por esta razón como por los motivos dichos de estar esta posta expuesta a las imbaciones de los Indios Infieles, no solo combendrá mandarle al Comandante del Saladillo le provea los mozos que necesite para el servicio de postillones sino que también sería oportuno obligar a alguno que asistiese esta posta".

 

El Fray Pedro José de Parras realiza numerosos viajes entre 1749 y 1753 de los que deja testimonio en el libro "Diario y Derrotero de sus viajes, 1749/1753 - España, Río de la Plata, Córdoba y Paraguay". Del mismo extraemos que el 19 de diciembre de 1750 por la mañana "... fuimos al paraje que llaman el Fraile anduvimos cuatro leguas desde la Estancia de Ruiz Diaz, que está en el paraje llamado El Salado y aquí se juntan el Río Tercero y Cuarto y mudando el nombre componen el río nombrado el Carcarañal que pasa por Calchaquí en entra en el Gran Paraná. El Río Cuarto trae el agua salada y viciando al Rio Tercero queda el Carcañal inservible de modo que no puede usarse para la bebida. Desde el Saladillo, ya es toda la costa del río muy pelada y desapacible porque no tiene árbol ni multa alguna en sus márgenes. Sin duda que la cualidad de ser tan salada el agua esteriliza toda la tierra que baña".

 

El Sacerdote José Manuel Peramás dejó un rico testimonio escrito sobre la expulsión de los jesuítas durante 1767; por su parte, será José A. Ferrer Benimeli quien estudiará dicho texto volcándolo en un trabajo que lleva por título "Viaje y peripecias de los jesuítas expulsos de América". Del mismo extraemos que el 1 de agosto de dicho año la comitiva pasó "... el Saladillo, llamado así porque hace salobres las aguas del río Tercero, en el cual entra a poca distancia el camino real. Por esta razón y la de no haber agua en las jornadas siguientes, hicieron provisión de agua en unas botijas que llevaba cada carreta. Justamente al pasar el Saladillo encontraron a unos caballeros de Buenos Aires que les contaron cómo habían preso a varios principales de la ciudad 'por ser afectos nuestros', a los que desterró Bucareli, a unos a la isla de Martín García y otros a Maldonado".

Walter B. L. Bose en su artículo "Córdoba, centro de las comunicaciones postales en las Provincias Unidas del Río de La Plata" consigna que "... a partir del 26 de agosto de 1779, Francisco Gutiérrez se hace cargo de la Posta de Esquina de Lobatón en carácter de Maestro. Al fallecer, el 2 de mayo de 1784, la responsabilidad fue asumida por su viuda Clara Juárez y un hijo de ambos de nombre Bruno Gutiérrez desde el 16 de abril de 1785. En 1786 se traslada al Saladillo de Ruíz Díaz por 'miedo a los indios' estableciendo una parada en la Esquina de Lobatón que servía Mathías José Gutiérrez desde el 26 de agosto de 1796, durante muchos años".

El historiador José Ignacio Avellaneda rescata el documento que, bajo el título "Descripción de los caminos, pueblos, lugares que hay desde la Ciudad de Buenos Ayres a la de Mendoza, en el mismo reino", fue escrito por el Comandante de Frontera y de las Armas del Partido de Cuyo José Francisco de Amigorena y fechado en Mendoza el 6 de febrero de 1787. El mismo es un relato pormenorizado del camino transitado por el expedicionario donde se da cuenta, no solo de las características de la ruta, los caminos secundarios y las distancias, sino que también aporta una importante y valiosa información sobre la geografía en general, los asentamientos poblacionales y sus recursos de subsistencia. De dicho diario de viaje extraemos un fragmento donde se consigna que, una vez dejada atrás la Posta de Cabeza de Tigre pasan a la siguiente Posta:

 

"A la Posta de la viuda de Gutierrez a la Esquina de Lovaton (se pagan 5 leguas): Esta Posta sinembargo de tener su foso, y Murallita en buen estado se ha despoblado después de la ultima irrupción de los Barbaros que la robaron todos los Cavallos, y hasta el Fuerte del Saladillo que hay tres leguas, no se encuentra rancho alguno, porque los que huvo fueron destruidos por los mismos, y asi los Correos no mudan desde la Caveza del tigre hasta las Barrancas que hay 11 leguas, y si sigue la osadia de los Indios como hasta aquí, se cortara tal vez la Posta, a lo menos desde los Desmochados hasta Fraile muerto, en cuyo caso sera preciso establecer una Posta en el Fuerte de la Esquina y otro en el de el Saladillo para que pueda correrse".

 

Si su interés es acceder al relato específico que abarca el trayecto transitado dentro del territorio cordobés, haga click aquí.

Por el contrario, si su deseo es tomar contacto con la integralidad del documento y por ende, de todo el viaje, haga click aquí.

 

Un relevamiento realizado por astrónomos alemanes en 1794 e integrado en un Anuario publicado en 1815 por J. E. Bode en su carácter de Miembro de la Academia de Ciencias Real de Alemania da cuenta de la medición, efectuada el 11 de abril de aquel año, para definir la ubicación de la Esquina de Lobatón tal como se consigna en la tabla adjunta:

 

 

El viajero inglés Alexander Caldcleugh Beatson (Londres, 1795 - Valparaiso, 1858) recorre la zona desde 1819 hasta 1821 recopilando experiencias que volcará en el libro "Viajes por América del Sur". Del mismo extraemos que:

 

Un 2 de marzo, salimos de la Posta Cabeza de Tigre "... para la Posta de Lobatón, a distancia de cinco leguas; al salir del pueblito vi dos avestruces domésticos y continuamos hasta las márgenes del Río Tercero. Nubes de mariposas alzaban vuelo entre los pastos y cubrían el campo. A dos leguas de allí vimos el sitio donde fue fusilado Liniers. Llegamos a Lobatón, un simple rancho y no cambiamos caballos hasta la Posta de Saladillo, nueve leguas más allá. Antes pasamos un río de agua salada que desemboca en el Tercero, éste también es salado en tiempo de seca. En la posta me encontré con un fraile franciscano que viajaba de Córdoba a Buenos Aires. Era hombre de edad provecta y parecía lamentar los cambios operados en el país por la revolución. Terminó sus comentarios con un 'no hay remedio' [en español en el original], expresión filosófica muy común en boca de los hispano-americanos".

 

Fragmento del libro de Alexander Caldcleugh

 

Hacia 1824, camino a Chile, el futuro Papa Pìo IX transita estos caminos. El relato de este viaje lleno de viscisitudes se editó en Roma en 1827 bajo el título "Storia delle Missioni Apostoliche dello Stato del Chile. Colla descrizione del viaggio dal vecchio al nuovo mondo fatto dall´autore". Del original del mismo extraemos unos párrafos donde se consigna que una vez dejada atrás la Posta de Cabeza de Tigre la comitiva se encuentra con la siguiente que es "... la de Esquina de Lobaton que sirve tan solo para el cambio de caballos. No se ve otra cosa en particular salvo un hermoso árbol muy ramificado del tipo de las Acacias de la Toscana el que está sobre el camino y que en el verano sirve para refrescar, con su sombra, a los viajeros. Este árbol tiene afiladas espinas en sus ramas cubiertas de tupida fronda. Su leño es muy colorido y firme y en todo Chile lo utilizan para fuego ya que arde con una llama clara como nuestras hayas dando brazas duraderas y ligeras que no afectan la cabeza. Este es el primer árbol propiamente natural que se observa desde Buenos Aires ya que todo el camino estuvo desnudo de árboles o de matorrales al menos hasta donde da la vista, con la salvedad de los pequeños recintos de las Postas que tienen sus propios árboles de duraznillos u otras frutas".

 

"Storia delle Missioni Apostoliche" y fragmento de interés

 

Desde Francia parten dos embarcaciones que atracarán en Chile a fines de 1825, se trata de la Fragata La Thetis y la Corbeta L'Esperánce. Un grupo de su tripulación inician, el 26 de enero de 1826, un largo camino con destino final en Buenos Aires cruzando la cordillera por el Paso del Río Blanco. A mediados de febrero arriban a la Posta de Esquina de Lobaton donde hacen noche. El relato de la travesía es asumido por el Teniente de Navío de La Thetis Conde Edmond de la Touanne con la tutela y autorización del Capitán de Navío Barón de Bougainville. La obra será publicada en París, varios años después, en 1837 bajo el título "Itinéraire Valparaiso et de Santiago de Chile a Buenos Aires para les Andes et les Pampas". El cuadro donde se refleja el detalle del itinerario recorrido, en el espacio reservado al tramo desde Punta del Agua hasta Arroyo de en Medio se deja constancia que "... Esquina de Lobaton es una mala Posta a menudo atacada por indios".

 

 

Al recorrer el texto de Edmond de la Touanne descubrimos algunas líneas que dan cuenta que habiendo dejado atrás la Posta de Barrancas donde "... los habitantes fueron obligados a rendirse y el pueblo de Saladillo que es un pequeño reducto protegido con un cañón que les permite defenderse de los ataques", el contingente "... termina haciendo noche en la Posta de Esquina de Lobaton a la que los indios visitan con frecuencia. Recién en Arroyo de en Medio encontramos una cabaña más segura ya que en ella no se esperan ataques atento que los aborígenes fueron desplazados, alejándolos de esta zona".

Alcides d´Orbigny recopiló y publicó numerosos viajes que involucraban a Sudamérica y Argentina. La obra publicada en varios tomos y bajo el título "Viaje pintoresco a las dos Américas" fue impresa en París hacia 1836 y años siguientes. En dicho material extraemos que los viajeros llegaron a "... la Cruz Alta, luego a la Cabeza del Tigre y finalmente a la Esquina de Lobaton, puntos fortificados todos al modo del país, y más o menos célebres por los ataques de los indios. El último sobre todo, situado en la provincia de Córdova, fue defendido y salvado, algunos años antes de mi paso por él, en enero de 1833, de los furores de una indiada o ejército de los indios; un coronel de las tropas del Tucumán y un francés, atrincherados solos detrás de sus murallas de cactus, asombraron de tal modo a los sitiadores con la exactitud de sus fuegos, que los obligaron a ceder. Después de haber luchado tres horas, se retiraron los indios con la pérdida de tres de los suyos y gran número de heridos, sin haber podido, a pesar de sus continuos esfuerzos, abrir una brecha en el fuerte que defendían los dos valientes que formaban la guarnición".

 

Alcides d´Orbigny y su obra "Voyage pittoresque dans les deux Amériques"

 

De la "Nueva historia de la Nación Argentina" extraemos que las necesidades, la cotidiana inseguridad y las permanentes situaciones de zozobra a la que se veían sometidas las pequeñas comunidades del interior no impedían que cierta "... normalidad se instalara apenas encontraban un resquicio favorable. Es así como las crónicas de viajes describen los bailes improvisados por el vecindario ... en todas partes, incluída la sombría posta de Lobatón, cercada por zanjas y arbustos espinosos, hay siempre a mano una guitarra y el baile puede comenzar en cualquier momento".

El médico alemán Ludwing Friedrich Froriep rescata, para la publicación científica "Noticias sobre Ciencias Naturales y Médicas" de 1839, un trabajo de 1835 realizado por James Tweedie que llevaba por título "Las pampas de Buenos Aires a Tucumán".

 

Del mismo extraemos que "... habiendo superado Cabeza del Tigere [así en el original] a 320 millas de Buenos Aires, la margen oriental del Río Carcaraña es un área que tiene un aspecto espléndido con bosques de algarrobos y chañares que bordean el río que se desplaza a una velocidad de una milla inglesa por hora a lo largo de un cañón de 30 o 40 pies de altura. La vegetación sobre la orilla arbolada es rala por falta de luz solar mientras que sobre el oeste el manto es denso hasta donde da la vista". Al avanzar en el texto da cuenta que se detuvieron en "... la abandonada Posta de Lobaton, donde la vegetación es extraordinariamente similar a la de Bahía Blanca, que está a más de 1100 millas de distancia". Superan luego el "... Saladillo de Ruiz Díaz, un pequeño río con orillas cubiertas de una blanca capa salada que se extiende unos 100 pasos sobre ambos márgenes; al pisar cruje como si se pisara hielo". El botánico hace especial mención a la presencia abundante "... de Oxalis, del perenne Eupatorium cannabinum y de la hermosa y pequeña Nierembergia gracilis"; las que configuran un paisaje "... de aspecto colorido". El científico reflexiona que todo el viaje mayoritariamente había sido a través de territorios "... áridos y despoblados"; en contradicción con esta zona donde los sauces y algarrobos crecen fuertes de resultas de la excelente agua del Río Carcarañá devenido en Tercero al que iban acompañando a corta distancia. El autor consigna haber visto "... varias casas y vastos campos de buena tierra hasta llegar a Frayle Muerto con sembradíos de maíz, calabaza, frijoles y tomates".

Fragmento del relato de James Tweedie

 

Hacia 1848, otro viajero, en este caso el pintor inglés Robert Elwes recorre estas vastas extensiones. Su travesía fue volcada a un libro que es publicado en 1854 bajo el titulo "Apuntes de un viaje alrededor del mundo", en el mismo se incluye un interesante número de ilustraciones y acuarelas de su autoría. De dicho material extraemos que durmieron en "... Esquina de Lobaton, una casa aislada y cercada con cactus". El autor reconoce que los hábitos de los lugareños "... han cambiado, aunque poco en los últimos treinta años". El inglés resalta en su diario que el Maestro de Posta muestra preocupación por la invasión de loros y le ofrece a Elwes "... su vieja carabina ..." invitándolo a eliminar algunos; la precariedad del arma hace que el viajero optara por "... desenfundar mi propia arma matando a dos pájaros".

 

Robert Elwes y su obra

 

En el mismo año, el abogado e historiador estadounidense Samuel Greene Arnold transita nuestras tierras uniendo Buenos Aires con Santiago de Chile. Su experiencia es volcada en un diario de viaje rico en puntillosos detalles de la vida cotidiana. Eran las 6 de la tarde del sábado 18 de marzo de 1848 cuando llegan a Lobatón encontrándose "... con una posta solitaria como no lo son las demás de las que hemos hablado, pero la más fuerte que hemos visto. Está rodeada por dos cercos de los cactos redondos y lobulados, que crecen más altos, más tupidos, más resinosos e impenetrables que los cactos de hoja ancha. Los retoños son casi del mismo tamaño, redondos y lobulados o rayados con 8 a 10 rayas cada uno, erizados de espinas y crecen muy juntos. Cada cerco tenía cinco pies de ancho abajo, de 10 a 12 arriba y por lo menos 15 pies de alto. Entre ellos había una zanja de unos seis pies de profundidad y diez de ancho. Dentro de todo estaba el rancho del gaucho, tan defendido de cualquier ataque como Gibraltar, de todo menos de la artillería ... Nos quedamos un rato con la mujer del gaucho y mi guía tocó la guitarra como lo hace en casi todas las postas donde siempre hay guitarras". Poco tiempo estuvieron en Lobatón continuando camino hacia la posta del Saladillo donde llegaron más allá de las 10 de la noche acompañados de un clima "... frío y lluvioso". Durante este trayecto de unas 5 leguas consigna en su relato que empiezan "... a aparecer árboles o más bien arbustos de la variedad de las mimosas y flores rojas brillantes que cubrían el suelo en grupos; una agradable variación del llano desolado desde hace muchos años y que, ahora, está con los colores amarillentos del otoño".

 

Samuel Greene Arnold y su diario de viaje

 

A mediados del segundo semestre de 1855, el escritor, historiador, naturalista y político chileno Benjamín Vicuña Mackenna recoge sus experiencias en la zona las que, volcadas a modo de diario de viajero, concluyen en dos tomos que llevarán por título "Pájinas de mi diario durante tres años de viajes - 1853/1854/1855". Del capítulo XXXIV extraemos que “... a las 7 de la noche llegamos a la posta del Lobaton, i ésta fue la ocasión en que llegamos más tarde a nuestro alojamiento. Es la posta del Lobaton, la más perfecta fortaleza que existe en la Pampa, con foso, puente levadizo i altísimas e impenetrables murallas de quiscos. La casa está en el centro del patio cuadrángular i se entra a éste por una especie de portillo i a gatas. Este fuerte está tan bien defendido porque se encuentra en el rumbo más directo por el que los indios penetran en la Pampa i ha sido varias veces atacada por ellos pero sin fruto; en una ocasión siete cristianos encabezados por un francés se defendieron aquí durante dos días consecutivos contra 200 indios. Encontramos la familia en el medio del patio, a orillas del fuego i se componía de una feliz pareja i unos cuantos chiquillos despedazados. Yo que llegaba primero que mis compañeros hablé a la mujer sobre comida; ella no me respondió por de pronto nada, i solo después de un rato me contestó que ella no tenia ni hacia nada, i si queríamos que conchavásemos una mujer para que nos cocinase, lo hiciésemos, i esta amable sílfida sacudiendo las cenizas de su camisón se fue muy tranquila a dormir. Pero si quiero se conchabó la mujer i pudimos después de dos horas comer una regular cazuela. Es de advertir como un lenitivo contra esta amabilidad campera que estos contrastes no nos ponían absolutamente de mal humor, sino que en la monotonía de nuestra vida todo incidente era motivo de risa”.

Benjamín Vicuña Mackenna, su libro "Pájinas de mi diario" y fragmento del mismo

 

A lo largo del período 1857 - 1860, el científico prusiano Karl Hermann Konrad Burmeister realiza un pormenorizado relevamiento de la Confederación Argentina. Luego, su trabajo es volcado en un imprescindible manual de consulta que se editará bajo el título "Viaje por los Estados del Plata". Su paso por Córdoba se realiza durante fines de febrero de 1857; el trayecto lo recorre utilizando un carretón de dos ruedas y una pequeña escolta aportada por Urquiza. Según su relato, luego de Cabeza de Tigre (actual Los Surgentes) y de transitar manteniendo dirección norte llegó a "... Lobatón, una pequeña estancia en medio del campo, sin otro adorno que un par de sauces grandes y un jardincito, rodeada de un buen cerco vivo compuesto de cactus columnares de leguminosas de espinas intercaladas que la convierten así en una especie de fortín con la tunas erguidas encima de un borde levantado a pala, el cual, por fuera, estaba erizado de arbustos espinosos. Una angosta entrada permitía pasar al patio donde se encontraba la casa y la amplia habitación de la posta".

 

"Viaje por los Estados del Plata" - Germán (Hermann) Budmeister

 

En 1865 el inglés Richard Arthur Seymour radicado en la zona reproduce el relato que le transmiten unos colonos amigos en tránsito hacia Rosario; de acuerdo al mismo, Lobaton es "... una miserable 'población' [en castellano en el original], que consta de tres 'ranchos' [en castellano en el original] de barro". Allí los viajeros, "... obtuvieron algo de comida, principalmente huevos y melones". Este texto corresponde al pormenorizado relato que el colono publicó años después bajo el título "Pioneering in the Pampas or the first four years of a Settler´s experience in the La Plata Camps".

 

"Pioneering in the Pampas" de R. A. Saymour y fragmento del mismo

 

Eran décadas en que la presencia permanente de los ataques indios provocaba que la zona quedase, con frecuencia, arrasada. Puntualmente, el Saladillo de Ruí Díaz y la Posta de Lobatón tenían el duro privilegio de ser las más afectadas junto con, en dirección este, las Postas de Cabeza de Tigre y Cruz Alta y hacia el oeste, Fraile Muerto. La razón se infiere en el hecho que los malones indios provenientes desde sus comunidades ubicadas en territorios de la actual Provincia de La Pampa, recorrían trazas bien definidas que se conocían como rastrilladas y que, a este sitio en particular, era a donde confluía el camino conocido como "de Las Tunas". Estas rastrilladas eran el resultado final en que quedaban los terrenos transitados tras el permanente movimiento de estos malones que, al momento de regresar tras los ataques, lo hacían arriando además los ganados vacunos y equino sustraídos a los colonos. Norberto Mollo en su trabajo de investigación que lleva por título "Rastrilladas indígenas en el sur de Córdoba", explica que la rastrillada de Las Tunas "... se extendía desde el Saladillo de Ruí Díaz, en las nacientes del Río Carcarañá, pasando por el paraje Las Tunas en dirección sur sudoeste, por la laguna Langheló y prolongándose hasta Tres Lagunas, cerca de Italó, donde se unía con la rastrillada del Sauce para constituir la de Trenel. Su extensión aproximadamente era de 280 kilómetros, abundando en su curso aguadas, cañadas, jagüeles y lagunas".

Esta misma rastrillada será utilizada, en 1869, por Lucio V. Mansilla y sus fuerzas durante la campaña de desplazamiento de la conocida como frontera sur del Río Cuarto al Quinto y liberándose así, todos estos territorios, de la amenaza permanente abriéndose el camino a la radicación definitiva de poblaciones estables a la que se sumaría una fuerte presencia de colonos extranjeros, principalmente italianos, atraídos con el fomento de la inmigración a partir de la ley promulgada en 1876.

Decíamos más arriba que Walter B. L. Bose en su artículo "Córdoba, centro de las comunicaciones postales en las Provincias Unidas del Río de La Plata" consignaba que "... a partir del 26 de agosto de 1779, Francisco Gutiérrez se hace cargo de la Posta de Esquina de Lobatón en carácter de Maestro". Su viuda y luego sus descendientes mantienen una relevancia significativa sobre la zona; de hecho, un siglo después, en un mapa de 1872 observamos que dicho apellido (con el cambio de "z" por "s") se conserva sobre amplios territorios sobre la margen sur del río Tercero. El apellido Araya, por su parte, aparece nominado en vastas zonas en la costa norte.

 

Mapa Chapeurouge 1872

 

Los apellidos Pintos, Gutierrez o Gutierres, Sosa, Araya aparecen, a lo largo de varias décadas, en un complejo entramado que, difícil de explicar de un modo sencillo, sucinto y poco tedioso, conforman el progresivo cambio de manos de las distintas fracciones en las que fue desgajándose todo este territorio.

Algunos de esos procesos son la consecuencia de fusiones vinculares (por ejemplo: relación de cuñados entre los Gutierres y los Sosa); otros, resultado de litigios o pleitos que involucraban a terceros o al mismo interior de un grupo familiar; hay compras con ciertos o aparentes marcos legales; pero,  también, producto de presiones e hipotecas bien o mal resueltas; disputas de reconfiguración de límites consecuencia de ilegales apropiaciones. El hilo conector de todo este anárquico derrotero es, la precariedad o la ausencia misma de documentación lo suficientemente válida que pudiese respaldar, de modo fidedigno, el reclamo genuino de propiedad sobre estas tierras.

En síntesis, solo quienes se han abocado a estudiarlos en profundidad son los más idóneos para poner, con mejores herramientas que las nuestras, cierta claridad sobre el tema. De allí que invitamos a recorrer las páginas del pormenorizado trabajo realizado por Juan D. Delius bajo el título "Reseña acerca de los campos que circundan la antigua estancia Monte Molina, Saladillo, Córdoba" y dentro del mismo, es muy útil detenerse en la información consignada sobre uno de los protagonistas centrales de esta historia: Pedro Araya, un comerciante residente en Rosario que cobraría significancia en esta zona.

Durante la década de 1860, con el desplazamiento de la frontera india hacia el sur, se inicia un proceso de regularización de los títulos de propiedad a lo largo de estas tierras.

Existe un trabajo realizado por Alexis Matías Ahumada que fue expuesto bajo el título "El acceso a la propiedad privada por confirmación de títulos en el confín sudeste de la Provincia de Córdoba, 1850-1880" del que podemos extraer un detalle documentado e interesante de como Pedro Araya va consolidando su presencia patrimonial en estos territorios que nos ocupan. De dicha investigación extraemos que Pedro Araya ingresa como tercero en una disputa de confirmación de derechos de propiedad de una superficie menor ubicada en una zona vecina al Saladillo de Rui Díaz en dirección a Fraile Muerto.

 

Mapa Echenique 1866

 

Según la documentación evaluada por Ahumada se concluye que Araya "... comenzó con la compra a Silverio Ramírez de una propiedad de 270 hectáreas, que provenían de la denuncia sobre tres leguas y media de tierras que realizó Nicolás Pintos en Las Barrancas, en 1797. Dicha compraventa fue protocolizada siete años después y dio pie a la conformación del resto del patrimonio de Pedro Araya. Es probable que a partir de esta primera adquisición Araya ocupara una superficie mucho mayor a la que le correspondía. Por lo menos su avance sobre los terrenos vecinos se puso al descubierto en una demanda de Mercedes Pintos, nieta y una de las sucesoras de Nicolás. Dicha demanda fue por ocupación ilegal de tierras, y se resolvió por la compra de derechos a la demandante, un año después. Además de comprar derechos a las distintas ramas sucesoras de Nicolás Pintos como es el caso de las operaciones de compra a las familias Ramírez, Pintos y Cabanillas, amplió su propiedad por la adquisición de terrenos colindantes a los titulares de los derechos de la denuncia que en 1797 realizó José Matías Gutiérrez, en Lobatón. Esto fue a través de compras a los herederos y al intermediario Félix María Olmedo quien representó a la familia Sosa en la restitución de sus derechos sobre estas tierras". El autor avanza en describir la sucesión de compras que va efectuando Pedro Araya incluso con precios extrañamente más altos que el valor real de mercado; sin embargo, durante el proceso de deslinde centrado en la década 1860-1870 y aún contando con suficiente documentación probatoria, no será él quien realice la respectiva gestión; recién, continúa Ahumada, "... a finales del siglo XIX la propiedad de Araya es legitimada mediante las distintas mensuras que sus sucesores realizaron, alcanzando aproximadamente 32 mil hectáreas, de las cuales la mitad representaba los derechos adquiridos del título precario de Nicolás Pintos, mientras que la otra mitad correspondía a los derechos de Matías José Gutiérrez".

 

En marzo de 1884, Pedro Araya e Hijos efectúa el trámite del registro de yerra correspondiente a la recientemente fundada "Estancia La Redención" que, con sede en Inriville, se suma a las distintas estancias que, con distintos nombres, eran de propiedad familiar.

 

(Material de Juan D. Delius bajo el título "Reseña acerca de los campos que circundan la antigua estancia Monte Molina, Saladillo, Córdoba")

 

El Poder Ejecutivo promulga, con fecha 27 de noviembre de 1888, un decreto que divide el Departamento de Marcos Juárez en cinco pedanías identificadas como Espinillos, Colonias, Las Tunas, Caldera y Cruz Alta. Esta última, por un nuevo decreto de fecha 3 de setiembre de 1891, es dividida en dos, conformándose las pedanías de Cruz Alta y la de Saladillo. La línea limítrofe de tal división nacía según la norma dictada "... de un punto denominado Lobatón en la costa del Río Carcarañá".

Del trabajo de Delius, por otra parte, extraemos que la Posta de Lobatón, como tal, estaba ubicada en cercanías del Río Carcarañá, pero iba teniendo distintas ubicaciones de acuerdo al paso de los años y los reiterados ataques indios que reducían el precario asentamiento en tierra arrasada haciendo que los relevamientos de variados viajeros la consignaran en diversos sitios; o incluso, ni siquiera la ubicasen. De esta profusa tarea de investigación rescatamos un documento de la Estancia de Lobatón que, según mensura de 1897, involucra buena parte de las distintas líneas familiares de los Araya.

 

Click para ampliar

Sección este del lote F102 identificado como Estancia El Lobatón (Material de Juan D. Delius bajo el título "Reseña acerca de los campos que circundan la antigua estancia Monte Molina, Saladillo, Córdoba")

Click para ampliar

 

De este conjunto patrimonial que disponen por herencia familiar los hermanos Araya de Avenada, una fracción perteneciente a Inri Jesús (1873-1952) más otros terrenos que éste le había comprado a su hermano Lincoln son destinados a ser utilizados en el asiento de una naciente población en torno a la estación de la próxima línea férrea ha ser construída por la inglesa Compañía de Ferrocarril Central Argentino Limitada. Las tierras destinadas a este fin fueron expropiadas a sus propietarios por las provincias de Córdoba, Santa Fe y el Gobierno Central. El contrato entre las partes fijaba que se "... donaban a la Compañía en plena propiedad una legua de terreno a cada lado del camino en toda su extensión a condición de poblarlas". El primer tren llegaría al pueblo hacia octubre de 1910. La palabra 'donación' aparecerá también en los planos de Inriville y su Estación que, frente a la Gobernación, se inscribirán en octubre de 1911. Por entonces, Inri Jesús Araya de Avenada cumplía poco más de un año de haber asumido  el cargo de Jefe Político del Departamento de Marcos Juárez. La tradición, asegura que fueron los mismos ingleses quienes eligieron el nombre de la estación y pueblo con el objeto de honrar a Don Inri. 

 

Mapa Warner 1903, mapa Peralta 1905 y Don Inri Jesús Araya de Avenada

 

En el Archivo Histórico de la Provincia de Córdoba en sus Series Notariales 1, 2, 3 y 4 correspondientes al período 1882-1925 encontramos dentro del Catálogo de Planos realizado por el Licenciado Eduardo Gould que a Folios 1168/1169 y 1176/1177 del 8 de octubre de 1911, refrendados ambos por el Escribano Adscripto Valentiniano Peralta, se incorporan sendos planos (correspondientes al Departamento Marcos Juárez, Pedanía Saladillo) identificando como "Partes" a "Inri Araya de Avenada (Cia. FF.CC. Central Argentino Limitada)" e individualizados en la columna "Pueblo/Ciudad", en un caso, como "Colonia Lincoln (Estación Inriville)" y en el otro, como "Inriville". En el apartado titulado como "Asunto" la primer ficha consigna lo siguiente: "COLONIA LINCOLN [INRIVILLE]: Plano de tres fracciones de terreno de colonia Lincoln que fueran donadas para vía y estación del ramal Cruz a Córdoba, FF.CC. Central Argentino. Colindantes: Por el Norte y Sur, con la colonia Lincoln de Inri Araya de Avenada; Este, con Pedro Araya; y Oeste, con Indalecia Larguía de Hernández. OBSERVACIONES: Cerca del lindero Este, las tierras son cortadas por un 'camino' a Saladillo"; mientras que, la segunda, expresa: "PUEBLO [INRIVILLE]: Plano de dos fracciones de terreno que fueran donadas para pueblo [Inriville] a deslindarse en estación del ramal Cruz a Córdoba, FF. CC. Central Argentino. Colindantes: La fracción Norte, por el Norte, Este y Oeste con Inri Araya de Avenada; y Sur, con, terreno destinado a estación y vía del ramal Cruz a Córdoba; y la fracción Sur, por el Sur, Este y Oeste, con Inri Araya de Avenada; y por el Norte con el citado terreno destinado a vía y estación. Observaciones: Las calles se hallan enumeradas del 1 al 20 y cada parte del pueblo tiene su plaza. En la parte Sur, los espacios reservados para edificios públicos se hallan frente a uno de estos espacios públicos y, además, se consignan las cuatro manzanas próximas que Inri Araya Avenada se reservaba para sí".

 

 

Cuando Manuel Río y Luis Achával publican, en 1905, la excelente "Geografía de la Provincia de Córdoba" incluyen una pequeña colección de fotografías que nos sirven para ejemplificar como se hacían notorias las diferencias entre los propietarios de la tierra y los que eran arrendatarios.

 

Instalación de colono propietario y de colono arrendatario

 

Frente a las malas cosechas de 1910 y 1911, la caída de los precios internacionales, el costo de los fletes controlados por manos extranjeras (servicios ferroviarios y marítimos) y el alto costo de los arriendos pautados en años mejores con terratenientes y grandes comercializadoras como Bunge y Born o Dreyfus; en junio de 1912, impulsados por colonos y trabajadores rurales en su mayoría inmigrantes italianos sumidos en la miseria, estallan los movimientos agrarios en Santa Fe. La historia los identificará como "El Grito de Alcorta" y será una reacción que, rápidamente, se extenderá hacia el este y sudeste de Córdoba.

El foco relevante en la amplia zona que nos ocupa se dio en Tortugas, sobre la misma frontera entre las dos provincias; para luego, esparcirse con distintos grados de intensidad hacia Marcos Juárez, Monte Maíz, Inriville, Justiniano Posse, Camilo Aldao, Arroyo Cabral, entre otras.

El resultado de los levantamientos en Córdoba, a diferencia del proceder en Santa Fe, concluyeron con violentas represiones decididas desde la administración política provincial. De la Compilación Documental realizada por Laura Blanca Perpetuo, bajo la dirección de Patricia Roggio y editada con el título "Relaciones del Estado con el mundo del trabajo. Córdoba 1910-1943" extraemos un documento del 16 de setiembre de 1912 donde consta que Pedro Mariani, en su calidad de administrador del Señor Inri Araya, se dirige al Comisario de Policía de Inriville denunciando que "... el individuo Justo Sonverón - colono del campo que administro, está cometiendo actos cuyo carácter afectan seriamente los intereses del propietario, incitando a los colonos pacíficos que no han querido abandonar su trabajo, a que abandonen sus tareas plegándose a la huelga de los demás del mismo gremio, habiendo para ésto citado a una reunión que se efectúa en el día de la fecha. Comprendiendo que la propaganda del individuo, declarando un boycott sin precedencias y de acuerdo a los artículos n°8 y 21 de la Ley de Defensa Social, pido se sirva proceder con Justicia en estos actos que podrán acarrear serios perjuicios".

 

En 1914 y producto del tercer censo nacional, se tiene una cabal visión del volumen de presencia extranjera en la zona, principalmente italianos y como cambia, de modo notorio, el destino productivo al que se inclina la producción territorial. Así mismo se evidencia como se profundiza la concentración propietaria en pocas manos. Quedan muy atrás los años de los intentos de los colonos ingleses dedicados a la producción ovina.

 

En particular, en lo que se refiere al Departamento Marcos Juárez, sobre 1898 involucrados en la actividad agrícola, el 69% eran italianos mientras que solo el 17%, argentinos. El resto se repartía entre 6% de españoles y 2% de franceses; convirtiendo en minorías absolutas a austríacos, suizos, alemanes, ingleses, chilenos, etc. De ese 69% de italianos, la amplia mayoría (76%: 993 sobre 1305) eran arrendatarios, tan solo el 20% eran propietarios y el resto empleados. Recordemos que, con el eufemismo de "empleados", en realidad nos estamos refiriendo a los peones rurales. Para esos años, más del 90% de los italianos privilegiaron la producción de los cereales y el lino mientras que el 7% se dedicaron a la ganadería y una mínima proporción optó por la alfalfa. Los argentinos por su parte distribuyeron su actividad, aún dentro de los mismos rubros, de modo más parejo donde uno de cada dos optaba por la ganadería mientras que los otros se dedicaban a lo agrario cerealero. También es interesante la diferencia cuando se observa la distribución propietaria donde los argentinos, a pesar de ser minoría frente a los italianos: el 30% eran propietarios, el 66% arrendatarios y solo 4% empleados.

 

 

Detalles del tercer censo nacional realizado en junio de 1914 durante la Presidencia de Roque Saénz Peña

 

A principios del siglo XX, el diario La Libertad (identificado como Liberal) publicaba una nota que describe, con crudeza absoluta, la migración hacia estos territorios de pobres en busca de una esperanza de vida que se les niega en sus asentamientos originarios. El texto es recogido por Beatriz Moreyra y Fernando Remedi en su trabajo "Las cosas de todos los días en los espacios rurales de Córdoba a comienzos del siglo XX". Del mismo extraemos la triste nota del periódico: "Un largo ejército de la gente sin trabajo de nuestros departamentos del norte y de las provincias vecinas desfila silencioso por nuestros caminos abrasados, al paso tardo de sus flacas cabalgaduras, llevando consigo en pequeñas maletas todos los bienes conseguidos en la labor de su vida. Los más felices atestan pestilentes vagones de segunda clase de nuestro ferrocarril". Según los autores a estos migrantes los describe como "... el éxodo de los desesperados del hambre". Con el avance del siglo XX las poblaciones se consolidan; el control propietario de las tierras se define y concentra con notoria y mayor claridad; el hecho es favorecido tanto por la riqueza productiva de los suelos como por los favorables precios internacionales que son impulsados por las necesidades propias de la primer guerra mundial; la sumatoria de acontecimientos, propiciarán períodos de bonanza que devendrán en beneficiosos réditos para muy específicos sectores concentrados en pocas manos de la naciente burguesía de la zona. El fenómeno hacia el interior del sudeste cordobés expone con dureza la fuerte diferenciación de clases que se exacerba producto de la injusta y desigual distribución de la riqueza generada.

A poco de iniciarse la segunda década del siglo, la Revista “Caras y Caretas” N°1253 del 07 de octubre de 1922 se ocupa de la naciente población publicando una fotografía de "... los concurrentes al banquete ofrecido al prestigioso vecino de esta localidad Sr. Carlos C. Vivanco, festejando su nombramiento de Presidente de la Comisión Municipal".

 

 

El siguiente mapa catastral de 1924 muestra la Estación y Pueblo Inriville y la distribución propietaria de la zona (material de Juan D. Delius bajo el título "Reseña acerca de los campos que circundan la antigua estancia Monte Molino, Saladillo, Córdoba").

 

 

La Revista “Caras y Caretas” N°1554 del 14 de julio de 1928 vuelve a dedicarle un espacio a Inriville y lo hace con motivo de la toma de posesión del cargo de Intendente de la Comuna por parte del Dr. Raúl Figueroa.

 

El Dr. Raúl Figueroa junto a sus colaboradores

 

 

El 28 de diciembre de 1959, la Municipalidad a través de su Departamento Ejecutivo emite el Decreto 52 refrendado por el Intendente Antonio Alberione. En el mismo se consigna que en "... mayo de 1910, don Inri J. Araya, con clara visión del progreso y de la civilización que representaría el paso del ferrocarril, donó al entonces Central Argentino, las casi cien hectáreas que configura el égido de esta Comuna, a la que en reconocimiento se la bautizó con su nombre". Basándose en facultades que le son propias y atento que "... el 21 de mayo es el onomástico del donante", se resuelve "... rendir homenaje a Don Inri J. Araya, como fundador de esta localidad, estableciendo como día de la fundación de Inriville el 21 de mayo de 1910. En adelante esta fecha sea declarada feriado local, como tributo a la visión y en memoria de su fundador".

 

 

La capilla

 

Click para ampliar

Click para ampliar

 

 

Hilda Augusta Schiavoni, en su trabajo contenido en "Civitatis Mariae - Historia de la Diócesis de Villa María" realizó una recopilación sobre el proceso de construcción del edificio religioso. Según su estudio ubica al año 1924 como el momento en que una comisión, creada al respecto, se ocupa de gestionar el espacio para erigir la futura iglesia colocando la piedra fundacional de la misma. Alentando este proceso, la Municipalidad se sumó con un aporte "... de 500$ destinados al pago del terreno"; que, para la época era un monto no menos significativo; sin embargo y en contradicción con ésto, según la historiadora, en el "... primer Libro de Actas de la Iglesia figura que dicho solar fue donado por el Sr. Miguel Taditti".

Hilda Augusta Schiavoni

 

Dos años de incertidumbres continuaron a esta primera intentona, el pueblo ya se iba configurando como tal luego de una década y media desde su fundación. Las necesidades de reemplazar la dependencia religiosa que ponía a Cruz Alta o Marcos Juárez como referentes más cercanos hacía que se impulsaran nuevas reuniones en procura de encontrar un nexo unificador que promoviese, finalmente, el fin anhelado. Es así como, durante el último trimestre de 1926 una nueva comisión se conforma donde el tradicional y conocido Sacerdote de la zona Juan G. Carole se integra. Según Schiavone se nomirán a "... Augusto Paiten como Presidente, Luis Valentini, como Secretario y en la función de Tesorero: David Passerini". Al otro día de la primer reunión registrada en actas (2 de octubre de 1926) ya se estaban iniciando las tareas de excavación; el proyecto estaba en marcha de un modo ejecutivo aún cuando ni siquiera se disponía, de modo formal, de los planos del mismo. De acuerdo a la historiadora, será "... el 11 de octubre el Sr. Juárez realizará el croquies bajo el asesoramiento y orientación de Augusto Paiten y Juan Carole"; el que se convertirá en plano definitivo por obra del "... Ingeniero Nacional Carlos Caselli".

Dejemos que la cronología de la obra quede en manos de quien mejor ha estudiado el tema; solo hagamos un esbozo a partir de una síntesis que, pormenorizada, mejor y de modo completo, hallaremos en el "Civitatis Mariae - Historia de la Diócesis de Villa María" bajo la pluma de Hilda Augusta Schiavoni; de su fecunda obra y en respeto a su autoría, extraemos algunas apostillas que incorporaremos en cursilla:

  • En diciembre de 1928 se inician las obras siendo "... el Sr. Ginato quien ejecuta la parte inferior y el Sr. Panichelli la superior".

Su imagen en 1929 - "Civitatis Mariae - Historia de la Diócesis de Villa María"

  • El 2 de julio de 1930 se bendice la iglesia con la presencia de "... Monseñor Lafitte y el Padre Juan G. Carole.

  • "La primera virgen [Nuestra Señora del Carmen] adquirida por la Flia. Irazoquei es sustraida". Esto obliga al Sr. Peiten a adquirir una nueva para el día de la inauguración.

  • El 14 de junio de 1931 se solicita que el padre Carole "... oficie misa en el pueblo una vez al mes".

  • La virgen robada es recuperada y actualmente está en el "... Hospital Dr. Raúl Figueroa".

  • El 16 de julio de 1935, "... es bendecido el Altar Mayor". Durante el mismo mes se "... completó la vereda y se adquirieron vinajeras, campanillas e incensario".

  • Dos años después, en 1937, "... la Sra. Angela Berardi de Palena donará la imagen de San Roque".

  • Durante el mismo año, para ubicar y homenajear a San Roque, se compra un altar "... al Colegio San José de Rosario colocándose en su lado derecho la figura de Santa Lucía obsequio de la Sra. Carolina de Palena".

  • Por esos años se inicia la costumbre de realizar la procesión que continuaba luego con "... tómbolas, baile y fuegos artificiales". Acceda aquí a una de estas expresiones realizadas recientemente.

  • En pleno invierno de 1939 y con la llegada de la provisión eléctrica se enriqueció la iglesia con la instalación de "... sendas arañas".

  • Sucesivas donaciones permitieron engalanar, con un mejor diseño, el púlpito incluyendo nuevas imágenes que se sumaron al acervo patrimonial del conjunto: "Santa Teresa de Jesús, un Vía Crucis, un Jesús Crucificado, la Virgen del Perpetuo Socorro, San Nicolás de Tolentino (traído de Italia)".

  • En 1941 y luego de una campaña de donación de hierro, bronce y dinero, se concretó la llegada de una campana realizada en Santa Fe que ocupó su lugar en la torre preparada para tal fin. Para ese mismo año, la iglesia contaba con "... quince bancos recientemente adquiridos".

  • Para 1944 la capilla ya tenía coro propio que se ocupaba de dar debido color a las ceremonias.

  • Con el objeto de tener un cura permanente, en julio de 1960 se elevan los planos de la Casa Parroquial a construir. La obra se termina techando el "... 27 de julio de 1960 y es bendecida el 5 de abril de 1961".

  • El 6 de abril de 1961 se nombra "... Vicario Ecónomo de la Parroquia de Inriville al R. P. Angel González quien se hace cargo a partir del 9 de abril de dicho año". De hecho, la novel parroquia quedaba desmembrada de su dependencia con la de Los Surgentes y de la de Camilo Aldao definiéndose de modo documental los límites específicos de su influencia territorial de acuerdo al "... Canon 1427, párrafo 1 y 2 refrendados por Monseñor Alberto Deane con fecha, 5 de abril de 1961".

  • Por lo significativo del hecho volcamos la totalidad del contenido, de modo textual, de lo escrito por la Profesora Schiavoni en su investigación: "El 4 de agosto de 1963 llegó en avión la imagen de Nuestra Señora de Fátima que fue colocada en carroza y custodiada por monaguillos de sotana blanca. La siguió una caravana de setenta coches y el 17 de agosto de 1963 comenzó la Misión. Los niños salieron en diferentes jornadas con globos, tambores, bonetes, caretas cantando 'aquí están, esos son los Changuitos de la Misión'. Después de la misa nocturna se proyectaron películas religiosas. Durante estas jornadas se hizo el acto de desagravio a Jesús Sacramentado, se armó una cruz con luces y flores, se vistieron a los niños de angelitos, se bendijeron los implementos agrícolas. Vinieron como Misioneros los Padres Anselo Opel y Eduardo Meléndez.

Click para ampliar

Click para ampliar

 

Su arquitectura

 

El templo se ubica en un amplio predio frente a la plaza 25 de mayo limitado por las calles Pasaje Inri Araya, Hipólito Irigoyen y Mariano Moreno.

La fachada principal, orientada al oeste, se encuentra retirada de la línea municipal generando un pequeño atrio que fue reducido por la incorporación de un nártex, de planta rectangular, apoyado en la fachada original.

 

En el frontis, presenta tres vanos que culminan en arcos de medio punto, siendo el central, flanqueado por sendas pilastras, de mayor tamaño que los laterales. También se accede por los costados con similares aberturas a las anteriores.  Tiene techo a dos aguas con pendientes más pronunciadas que las de la nave.

En segundo plano, en el eje de simetría, un portal de dos hojas batientes, permite el ingreso al templo.

A sus costados sendas lesenas se elevan enmarcando la mono torre campanario, acompañadas por arcos ciegos que se elevan hasta el nivel del inicio del techo.

El hastial culmina con una moldura rectilínea, interrumpida por la presencia de la torre campanario, que es de sección cuadrada con amplias aberturas en sus cuatro caras.

Asentada sobre una moldura de líneas rectas, el techo piramidal culmina con una cruz de hierro forjado.   

La fachada sur, está retirada de la línea municipal, generando un espacio verde. Una vista en geometral permite observar el nártex de costado con su abertura con arco rebajado, la torre campanario, y el plano de la nave.

Seis pilastras cuyos capiteles rectilíneos superan el nivel de descarga de aguas del techo, ritman esta fachada, acompañadas por el contraste de colores.

En el centro de cada uno de los espacios generados una ventana con arco de medio punto acerca buena iluminación al recinto.

El templo es de planta rectangular con sacristía del lado del evangelio. El presbiterio es un hemi hexágono irregular.

El altar, post conciliar, está conformado por peanas donde se asientan las imágenes. Al centro y más elevada, la Virgen Nuestra Señora del Carmen, a su izquierda la imagen del Sagrado Corazón y a la derecha San José y el Niño.

    

Ubicación

32º 56’ 46,08”  latitud sur

62º 13’ 48.15”  longitud oeste

 

 

 

 

Fuentes de consulta:

  • Magaz, María del Carmen y Sorroche Cuerva, Miguel Angel en su carácter de Director y Co-Director de un equipo de investigadores de la Universidad del Salvador y la Universidad de Granada: "Patrimonio y paisajes culturales en el Camino Real a Buenos Aires".

  • Delius, Juan D.: "Reseña acerca de los campos que circundan la antigua estancia Monte Molina, Saladillo, Córdoba" - Konstanz, Alemania.

  • Sallusti, Giuseppe: "Storia delle Missioni Apostoliche dello Stato del Chile. Colla descrizione del viaggio dal vecchio al nuovo mondo fatto dall´autore" - Tomo Secondo - Roma, 1827.

  • Schiavoni, Hilda Augusta: "Civitatis Mariae - Historia de la Diócesis de Villa María - Inriville, Nuestra Señora del Carmen" - 2006.

  • Mackenna, Benjamín Vicuña: "Pájinas de mi diario durante tres años de viajes - 1853/1854/1855" - Santiago de Chile, 1856.

  • Caldcleugh Beatson, Alexander: "Viajes por América del Sur" - 1819/1821 - Londres 1825.

  • Elwes, Robert:"Apuntes de un viaje alrededor del mundo" - 1854.

  • Ferrer Benimeli, José A.: "Viaje y peripecias de los jesuítas expulsos de América" - Universidad de Zaragoza - Revista de Historia Moderna N° 15 - 1996.

  • d´Orbigny, Alcides: "Voyage pittoresque dans les deux Amériques" - París - 1836.

  • Fray Pedro José de Parras: "Diario y Derrotero de sus viajes, 1749/1753 - España, Río de la Plata, Córdoba y Paraguay".

  • Teniente de Navío de La Thetis Conde Edmond de la Touanne con la autorización del Capitán de Navío Barón de Bougainville: "Itinéraire Valparaiso et de Santiago de Chile a Buenos Aires para les Andes et les Pampas" - París - 1837.

  • Seymour, Richard Arthur: "Pioneering in the Pampas or the first four years of a Settler´s experience in the La Plata Camps" - Longmans, Green & Co. - London, 1870.

  • Bode J. E.: "Astronomisches Jahrbuch" - Königl Akademie der Wissenschaften - 1815.

  • Río, Manuel E. y Achával, Luis: "Geografía de la Provincia de Córdoba - Volumen I" - UNC - 1905.

  • de Amigorena, José Francisco: "Descripción de los caminos, pueblos, lugares que hay desde la Ciudad de Buenos Ayres a la de Mendoza, en el mismo reino - 6 de febrero de 1787" - Presentación de José Ignacio Avellaneda - Cuadernos de Historia Regional N°11 Vol IV Abril 1988 - Universidad Nacional de Luján (EUDEBA) (Acceda al documento completo)

  • de Lazcano Colodrero, Arturo Gustavo: "Monografía de Laguna Larga" - Archivo Histórico de Córdoba - 1956.

  • Moreyra, Beatriz y Remedi, Fernando J.: "Las cosas de todos los días en los espacios rurales de Córdoba a comienzos del siglo XX"- Centro de Estudios Históricos "Prof. Carlos S. A. Segreti" - UNC/Conicet - 2005

  • Gould, Eduardo: "Catálogo de Planos - Archivo Histórico de la Provincia de Córdoba" - Series Notariales 1, 2, 3 y 4 correspondientes al período 1882-1925.

  • Bose, Walter B. L.: "Córdoba, centro de las comunicaciones postales en las Provincias Unidas del Río de La Plata" - Labor de los Centros de Estudios de la UNLP - 1942.

  • Greene Arnold, Samuel: "Viaje por América del Sur - 1847/1848" - EMECE - 1951.

  • Tweedie, James: "Las pampas de Buenos Aires a Tucumán" (1835) - Material recopilado por Froriep, Ludwing, Friedrich en "Noticias sobre Ciencias Naturales y Médicas" - 1839.

  • Catera, María Celeste y Gigli, Sofía Angeles: "Proyectar el horizonte" - Proyecto Final de Carrera -FAPYD, UNR - 2017

  • Mollo, Norberto: "Rastrilladas indígenas en el sur de Córdoba" - Revista Sociedades de Paisajes Aridos y Semi Aridos, Volumen XIII, 2019

  • Diario La Libertad, 20 de noviembre de 1900

  • Revista “Caras y Caretas” - N°1253 del 07 de octubre de 1922 - Biblioteca Nacional de España.

  • Revista “Caras y Caretas” - N°1554 del 14 de julio de 1928 - Biblioteca Nacional de España.

  • House, Guillermo: "El último perro" - Revista "Leoplán" - Magazine Popular Argentino n°338 - 17 de junio de 1948

  • Burmeister, Karl Hermann Konrad - "Viaje por los Estados del Plata" - Academia Nacional de Historia, Buenos Aires, 2008

  • Perpetuo, Laura Blanca, Roggio, Patricia: "Relaciones del Estado con el mundo del trabajo. Córdoba 1910-1943" - Compilación Documental - UNC, 2016

  • ACADEMIA NACIONAL DE HISTORIA: "Nueva historia de la Nación Argentina" - Tomo 6 - 1997

  • Ahumada, Alexis Matías: "El acceso a la propiedad privada por confirmación de títulos en el confín sudeste de la Provincia de Córdoba, 1850-1880" - III Congreso Latinoamericano de Historia Económica y XXIII Jornadas de Historia Económica - San Carlos de Bariloche - 2012.

 

 

 

 

 

ll Home ll Objetivos ll Búsqueda ll por Nombre ll por Localidad ll Mapas ll Patrimonio ll Glosario ll

ll Fiestas ll Las Capillas y el Arte ll Biografías ll

 

La Página Web "Capillas y Templos" es una iniciativa privada sin fines de lucro que no mantiene vinculación alguna

con los distintos templos aquí descriptos como así tampoco con la Iglesia Católica

ni con ningún otro Credo Religioso u Organismo Gubernamental.

 

La Página Web "Capillas y Templos" se encuentra registrada

en la Dirección Nacional del Derecho de Autor:

Ver DETALLE

 

Se prohibe la copia y/o reproducción parcial o total del material contenido en la presente Página

sin la expresa autorización de los autores de la misma.

De modo explícito, no autorizamos ningún tipo de utilización del presente contenido

que signifique fines comerciales y/o rentables.